- Investigación básica: Es aquella donde solo se busca nuevo conocimiento, sin buscarle ninguna aplicación. Está promovida por la curiosidad y el ansia de saber humanos y es la base de todo conocimiento científico y de toda innovación.
- Investigación aplicada: En este caso sí que se buscan aplicaciones a la investigación a corto plazo. Es una investigación más práctica
- Desarrollo tecnológico: Se trata de usar conocimientos previos, generalmente a partir de los dos anteriores, con el fin de obtener nuevos productos, equipos o procesos o bien para mejorar los existentes.
La innovación surge a partir de las ideas ¿y de donde vienen las ideas? del ser humano. Cuando conocí la palabra brainstorming, me encantó este modo de innovar, donde uno puede decir lo que quiera, de forma relajada, sabiendo que si es un tontería, todos reiríamos y nadie te miraría mal. Muchas veces de esas tonterías, surgen ideas geniales, y de ahí a la innovación solo hay un paso.
Y es que para innovar hay que arriesgar y eso no va mucho con la función pública, donde se tiende a implantar solo las cosas que otros han probado ya con éxito. Existe la tendencia - y yo lo veo especialemente en el ámbito tecnológico donde trabajo - a no arriesgar, a poner lo que funciona seguro. Es muy conocida la frase "a nadie la echan por poner IBM". Esa frase solo refleja el miedo al fracaso y así es imposible innovar. Otra conocida frase "que inventen otros" también podría decirse "que innoven otros". A veces hay que lanzarse y si algo no funciona, aprender de los errores y solo así mediante un proceso de prueba y error llegaramos a la mejora y al refinamiento de los procesos.
Tampoco es cuestión de irse lanzando a la piscina continuamente pues luego siempre arrecian las críticas como la típica "claro como gastan un dinero que no es suyo...".